Hoy definitivamente es el último día que utilizaré este blog. Dentro de mi estrategia digital para el 2012 estaba confeccionar una página web personal y profesional. Ya está totalmente finalizada y utilizaré ya solo ese entorno para compartir con vosotros mis opiniones, expectativas y deseos. Espero que os guste.
lunes, 30 de enero de 2012
miércoles, 25 de enero de 2012
El cine: vademecum del alma
El cine es un magnífico arte que puede servirnos para la formación. En el Módulo "El Humanismo propone un brindis" de la Lider Escuela de Gestión este próximo sábado vamos a dedicar dos horas a profundizar en los mensajes que podemos extraer de diferentes películas que sin duda transmiten de una forma directa e impactante. Espero conseguir el efecto deseado. Presentaré para el análisis las siguientes secuencias de conocidas películas agrupadas por bloques temáticos:
- APRENDIZAJE:
- IDEAS:
- DIFICULTADES:
- ENCONTRAR SENTIDO:
- EL FAVOR DE LOS IGUALES:
sábado, 21 de enero de 2012
Mi estrategia digital para el 2012
Dentro de los proyectos profesionales que quiero emprender este año 2012, uno primordial en mi agenda es mi estrategia digital.
Entiendo que en estos momentos debemos compartir conocimientos para poder crecer y ser más utiles en nuestra sociedad. En las épocas de crisis, las aportaciones de diferentes líderes de opinión o expertos en diferentes materias son muy necesarias.
Este año va a ser el de la puesta de largo de "Medicina basada en el humanismo". En unas semanas presentaré el libro que servirá de base para que se puedan desarrollar el resto de iniciativas alrededor de este nuevo movimiento.
En este blog he escrito semanalmente y he recibido casi 28000 visitas a los contenidos que he compartido. Estoy en la red social Twitter, sigo casi a 800 personas y me siguen más de 500. He comprobado que puedo llegar a muchas más personas si utilizo las nuevas tecnologías. De esa constatación, se origina mi nueva estrategia digital de desarrollo profesional para este año 2012.
En primer lugar he construido, junto a mi programador y diseñador Alvaro, una nueva página web que pretende ser punto de encuentro con todos vosotros. La dirección es:
Puedes visitarla desde este preciso momento. Comprobarás que no está totalmente concluida, ya que por desgracia Álvaro no ha podido finalizar el trabajo porque su padre ha fallecido en estos días. Ha hecho un esfuerzo enorme por concluirla y yo se lo agradezco de corazón en estos momentos tan difíciles para él. Cuando él quiera y pueda, la finalizará. Gracias a Álvaro por su buen trabajo.
La aparición de esta web me hace que no siga escribiendo en este blog, ya que la propia web tiene un cuaderno de bitácora. Me da pena, pero seguro que todos comprendéis que debo centrar mis esfuerzos en mi nuevo portal. En él encontraréis gran parte de mis escritos y mis opiniones. Espero que os guste y os sea útil.
Dentro de la página web nueva hay un apartado dedicado exclusivamente a "Medicina basada en el humanismo". Comparto gran parte de sus contenidos y me permitirá acercarme más a los internautas.
Una vez que esté rodada la web, os daré una nueva sorpresa dentro de unos pocos meses. De la mano de un gran diseñador y programador especializado en los entornos Apple, Alejandro, me propongo hacer un Apps para compartir "Medicina basada en el humanismo". En él habrá textos, vídeos y podcats de este movimiento de una forma totalmente gratuita.
No tengo mucho dinero, pero el poco que tengo lo estoy invirtiendo en esta nueva estrategia digital que espero me permita navegar por nuevos mares y océanos. Soy sencillo en mi propuesta pero ambicioso en el alcance de su contribución a la sociedad. El tiempo y las personas me darán o quitarán la razón.
Despedirme de este blog es para mi difícil, pero necesario. Me voy recordando al gran Antonio Vega y "El sitio de mi recreo", hasta pronto:
i-pacientes
La enfermedad durante muchos siglos fue cosa de dos: el enfermo y el médico. La persona quebrada en su salud acudía a relatarle al profesional la historia de su enfermedad. La palabra era el gran instrumento con el que contaban los dos. La comunicación entre ambos semejaba al encuentro íntimo entre dos personas que compartían lo más importante de ambas. Las palabras adquirían el valor de lo imprescindible para poder transmitir el mal y buscarle solución al mismo. La estructura narrativa del relato de la enfermedad por parte del paciente convertía al médico en un auténtico experto en la literatura esencial de los cuerpos y las almas. Analizando cada relato podía llegar a lo relevante de la enfermedad de la persona en concreto, y convertir sus palabras en síntomas y signos, que ayudarían de forma indispensable a construir un diagnóstico que le procurara una posible respuesta en forma de tratamiento por parte del médico. La palabra era el centro de este encuentro. Mimando las palabras se cuidaba a los hombres.
El desarrollo tecnológico que las diferentes ciencias estaban procurando a lo largo de los siglos, llegó a sus más altas cotas de éxito en el siglo XX. La tecnología puso a disposición de la ciencia médica lo que se vino en llamar “tecnologías diagnósticas”. A través de diferentes pruebas podíamos conocer realidades internas del hombre sin poner en peligro su integridad, con las pruebas de laboratorio o las pruebas radiológicas. A partir del 1895 de la mano de Roetgen y el descubrimiento de los rayos X, el cuerpo del hombre comenzó a convertirse en visible. Todo un cambio de paradigma que revolucionó las posibilidades de estudio del paciente. La palabra no era la única transmisora de información en el proceso de enfermar. Muchas veces ya se convirtió en espectadora silenciosa. El cuerpo humano paso de ser el protagonista a convertirse en un auténtico “objeto” de estudio por parte del médico que se valía de las nuevas pruebas diagnósticas.
Desde ese preciso momento el encuentro entre el médico y el enfermo se vio modificado en su esencia, la tecnología era un invitado imprescindible y permanente. A veces, ella se convertía en la amiga necesaria y en otras ocasiones sólo en la “cotilla” prescindible. En todo caso, ya nada volvió a ser igual. La tecnología invadió la Medicina y silenció la palabra, menospreció el tacto y restó valor a la mirada. Era el pago necesario para valerse de los beneficios de convertir al hombre enfermo invisible en sujeto biológico visible. Desapareció para siempre la intimidad entre los protagonistas del proceso de enfermar y sanar.
El escritor y médico Abraham Verghese describe en el siguiente video este extraño y nuevo mundo en el que los pacientes se han convertido en simples datos. Es el padre del concepto "i-patient". Su apuesta es por el acercamiento del médico al enfermo a través del tacto, la exploración.
Cercana la aparición de mi libro "Medicina Basada en el Humanismo", considero que este video transmite bien la senda que debemos recuperar los médicos interesados en el hombre.
El desarrollo tecnológico que las diferentes ciencias estaban procurando a lo largo de los siglos, llegó a sus más altas cotas de éxito en el siglo XX. La tecnología puso a disposición de la ciencia médica lo que se vino en llamar “tecnologías diagnósticas”. A través de diferentes pruebas podíamos conocer realidades internas del hombre sin poner en peligro su integridad, con las pruebas de laboratorio o las pruebas radiológicas. A partir del 1895 de la mano de Roetgen y el descubrimiento de los rayos X, el cuerpo del hombre comenzó a convertirse en visible. Todo un cambio de paradigma que revolucionó las posibilidades de estudio del paciente. La palabra no era la única transmisora de información en el proceso de enfermar. Muchas veces ya se convirtió en espectadora silenciosa. El cuerpo humano paso de ser el protagonista a convertirse en un auténtico “objeto” de estudio por parte del médico que se valía de las nuevas pruebas diagnósticas.
Desde ese preciso momento el encuentro entre el médico y el enfermo se vio modificado en su esencia, la tecnología era un invitado imprescindible y permanente. A veces, ella se convertía en la amiga necesaria y en otras ocasiones sólo en la “cotilla” prescindible. En todo caso, ya nada volvió a ser igual. La tecnología invadió la Medicina y silenció la palabra, menospreció el tacto y restó valor a la mirada. Era el pago necesario para valerse de los beneficios de convertir al hombre enfermo invisible en sujeto biológico visible. Desapareció para siempre la intimidad entre los protagonistas del proceso de enfermar y sanar.
El escritor y médico Abraham Verghese describe en el siguiente video este extraño y nuevo mundo en el que los pacientes se han convertido en simples datos. Es el padre del concepto "i-patient". Su apuesta es por el acercamiento del médico al enfermo a través del tacto, la exploración.
Cercana la aparición de mi libro "Medicina Basada en el Humanismo", considero que este video transmite bien la senda que debemos recuperar los médicos interesados en el hombre.
viernes, 20 de enero de 2012
¿Dónde puedo curarme?
Cuando Ramona Pierson tenía 22 años fue atropellada por un conductor ebrio y pasó 18 meses en coma. En TEDxDU, relata la extraordinaria historia de su recuperación gracias a las habilidades y la sabiduría de los residentes de una residencia de ancianos. Todo un ejemplo.
Sándor Márai. "Confesiones de un burgués"
El día que me conocí a Sándor Márai en su novela "El último encuentro" me ganó para toda la vida. Representa mi ideal de escritor humanista preocupado por los grandes temas del hombre. He leido todo lo que se ha publicado en español sobre el escritor húngaro. Soy un enamorado de su obra. Hace ya muchos meses que la editorial Salamandra no publica ninguna obra suya.
En mi libro "Lágrimas de papel" le dediqué un capítulo completo a su figura y legado. Quiero compartirla hoy con vosotros para que podáis encontraros con él y creced como personas. Que aproveche.
domingo, 15 de enero de 2012
Home
El hogar es puerto seguro. Allí las aguas suelen ser tranquilas, amables. Nos encontramos con las personas y objetos que significan mucho para nosotros, y no tememos a nada.
El hogar es la patria de todos los que somos inseguros y vulnerables por naturaleza. En él, incluimos a todos los que nos quieren, nos miman, se preocupan por nosotros.
En esta tarde oscura de hora incierta, Michel Buble nos ayuda a encontrarnos con las personas que queremos por ser indispensables para nosotros.
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